Yolanda Sandoval
ysandoval@prensa.com
Los millones sobran y la mano de obra es escasa.
Más de 600 millones de dólares se invierten en proyectos y construcciones que se desarrollan actualmente en la ciudad capital, pero no hay suficiente personal calificado para atender todas las obras.
Contratistas, obreros de la construcción y funcionarios hablan de un déficit que se siente mayormente en las obras pequeñas y los trabajos independientes de remodelación.
“Se necesitan carpinteros, albañiles, reforzadores, ebanistas... en fin”, dice Gregorio Guerrel, secretario de Salud y Seguridad Ocupacional del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs).
En Suntracs hay unos 50 mil afiliados, estima Guerrel, y se calcula que otros 50 mil trabajadores no listados en el sindicato participan de esta actividad. Sin embargo, los 100 mil trabajadores no le son suficientes a una industria que avanza a grandes pasos.
“Tenemos todo tipo de problemas. Como no hay personal, se extienden los tiempos de entrega de las obras y muchas empresas están contratando, ante la desesperación, al que llegue”, argumenta Juan Villarreal, de Real Village Construction, empresa especializada en restauraciones en el área de San Felipe.
Hernán Bonilla, de Elecplom, ha vivido el tema de la escasez de personal. “Como subcontratista nos enfrentamos a una alta rotación. Sabemos que entrenamos al personal para que vaya algún día, pero no todos los días”, expresa.
Lo interesante en este proceso, según Guerrel, es que ahora los trabajadores de la construcción tienen la opción de escoger entre empresas que les garanticen condiciones de seguridad y buenos salarios.
Lo que hoy sucede en esta industria es el reflejo de lo que pasa a nivel macro: la escasez hace que el precio aumente, y hablando del mercado laboral, que los salarios suban.
PLANIFICACIÓN
Juan Planells, director del Instituto Nacional de Formación Profesional y Capacitación para el Desarrollo Humano (Inadeh), asegura que el año pasado capacitaron a 8 mil personas destinadas a la industria de la construcción.
Para 2008 se espera capacitar a 10 mil panameños, tomando en consideración los requerimientos de megaproyectos como la cinta costera, la carretera Panamá-Colón y la ampliación del Canal.
“Creemos que la oferta que tenemos es oportuna, ante la construcción de las dos esclusas postpanamax y proyectos privados como Los Faros de Panamá, que ya han hecho requerimientos específicos de personal”, asegura Planells.
Encontrar el balance entre la oferta y la demanda será el reto. Planells reconoce que no se trata de abarrotar el mercado laboral de personas que en pocos años no tendrán ninguna trascendencia en la dinámica económica del país. Hay que tomar en cuenta, como dice la agencia Manpower, que los empleos de moda se vuelven efímeros tan rápido como cambia el ciclo de vida de un producto. Un ciclo de habilidades que anteriormente tenía una vigencia de tres años, ahora solo dura nueve meses.
Así de cambiante es el mercado.
Se triplica el empleo en la construcción
La ejecución de proyectos residenciales, no residenciales, y las obras de ingeniería civil desarrolladas en la ciudad de Panamá, han mantenido su dinamismo. Tanto es así, que de acuerdo con los datos que maneja la Cámara Panameña de la Construcción, el sector construcción está empleando directamente a 130 mil trabajadores, es decir más del triple de lo que empleaba en la década de 1980.
La dirección de Obras y Construcciones del Municipio de Panamá tramitó, durante el primer semestre de este año, 772 permisos de construcción de obras, lo que suma 600 millones de dólares.
Los reportes que maneja esta entidad indican que dentro de este período, los meses en los que se ha tramitado la mayor cantidad de permisos de construcción han sido enero (con 176), abril (con 165) y marzo (con 155).
Igualmente se expidió un total de mil 81 permisos de ocupación, lo que representó una recaudación de 147 millones 905 mil dólares en concepto de impuestos en permisos de ocupación.
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