Ereida Prieto-Barreiro
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Con esta medida, en muchas carretillas estarán ausentes los productos que requieren de refrigeración.
Este aumento será más perceptible en los productos que requieran refrigeración, pero también afectará otros víveres, reveló Iván Ríos, presidente de la Asociación de Comerciantes y Distribuidores de Víveres y Similares de Panamá (ACOVIPA).
"Lamentablemente tendremos que traspasar a los consumidores los costos energéticos y de combustible", sostuvo Ríos.
Para Ríos, el aumento es una decisión adoptada por los comerciantes que agrupan a ACOVIPA, para así evitar destituciones en sus negocios.
Destacó que el precio dependerá también del alza tarifaria que anunciará próximamente la Autoridad de los Servicios Públicos (ASEP), por lo que insistió en que el gobierno debe "tomar acciones urgentes" para detener estos aumentos.
Consecuencias.
Los panameños no sólo tendrán que sufrir por el alto costo de la vida, sino que algunos hasta podrían perder sus empleos.
Jaime Campuzano, del sector hotelero, aseguró que "desafortunadamente cuando baje la ocupación turística, tendremos que reducir la mano de obra para hacer frente a los aumentos que de manera arbitraria realizaron las empresas eléctricas".
Recordó que ese sector genera 120 mil empleos directos e indirectos que están en peligro por la crisis que enfrentan.
Indicó que algunos hoteleros han tenido que afrontar el pago mensual hasta de 150 mil dólares en consumo energético, más 50 mil dólares por la cláusula de combustible.
Por su parte, Gaspar García de Paredes, presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CoNEP), señaló que el problema del petróleo afecta a todos los sectores por lo que observan con "preocupación" el desarrollo económico del país.
Dijo que sería "lamentable" que las empresas trasladen sus costos a los clientes.
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