El pliego de cargos de la licitación para los primeros 420 buses del Transmóvil ha convencido a algunos fabricantes de que el Gobierno busca que el acto público quede desierto, para luego hacer una contratación direcata.
La representante de la compañía estadounidense Roman Chariot, Maritza de la Aspriella, opinó que las condiciones para participar en la licitación son “absurdas”. Empezando por el plazo de 180 días que tendrán las empresas para entregar los vehículos, y porque aún se desconocen detalles básicos, como la fórmula que utilizará el Estado para pagar.
“El 15 de enero es la licitación y no han publicado los cambios hechos al pliego de cargos, entonces, ¿cómo podemos elaborar una propuesta?”, se preguntó.
En este sentido, el vocero de la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre, José Hernández, aclaró que están evaluando cambiar la fecha de la licitación por el retraso que han tenido en divulgar los cambios al pliego.
“Estamos trabajando en el acta de homologación. Cuando tengamos todo listo, lo subiremos a la web y definiremos si se cambia el día de la presentación de propuestas”, explicó.
De la Aspriella, y Franklin Becerra, de Europa Motors –que comercializa Volkswagen–, temen que las irregularidades del pliego den ventaja a empresas asiáticas.
“Nadie pone en duda que los asiáticos pueden cumplir, pero tampoco se puede negar que los buses japoneses y chinos no duran ni un año en la carretera. Su carrocería es delgada y no aguanta la salinidad y la humedad de Panamá”, dijo de la Aspriella.
El dirigente de la piquera de Pedregal, Dionel Broce, quien puso a circular en 2007 un bus chino de la marca Higuer, aceptó que tuvo algunos problemas mecánicos y que el acondicionador de aire no estaba diseñado para el clima del país.
El presidente de Ameristar Sales & Leasing, Thomas Salvatore Ciraulo, afirma que su compañía brasileña, que vende buses fabricados en China, puede entregar 150 buses en los primeros 90 días del plazo y los demás en menos de 150 días. Aún así tiene quejas: “El pliego es complicado y difícil de entender”, manifestó.
Por otro lado, Broce dijo que la fecha real de la licitación no se debe retrasar porque “algunos no puedan cumplir con lo que exige el Gobierno”, y alertó de una posible escasez de buses.
Explicó que desde el 14 de mayo de 2008, el Gobierno no permite que entren al país buses de segunda ni emite certificados de operación.
“Si desde hace meses no se pueden reponer los buses que están ‘muriendo’, y no llegan los del Transmóvil, no habrá transporte”, apuntó.