Rafael Rodriguez rrodriguez
La inseguridad está fuera de control, y eso se refleja en varios hechos esta semana: el secuestro del hijo de un magistrado, el asesinato de Boris Girón Moreno —escolta del alcalde Juan Carlos Navarro—, y del empresario Eduardo Cattán, así como el asalto a un camión articulado para extraerle los miles de galones de combustible que transportaba.
Y las estadísticas son de terror: de los 40 crímenes cometidos en enero, 19 fueron perpetrados por menores de edad, lo que ha traído nuevamente al debate el que se les castigue como a un adulto.
Si los números se ven en un aspecto más amplio, entre enero de 2006 y septiembre de 2007, los menores se vieron involucrados en 193 homicidios, los que se cometieron en Panamá, San Miguelito y Colón. En esas áreas se ejecutaron alrededor 730 homicidios en ese período. “Eso quiere decir que los menores cometieron casi el 30% de los homicidios y no el 4% como dicen voceros del MIDES (Ministerio de Desarrollo Social), para confundir a la opinión pública”, señala el abogado penalista Renato Pereira.
Las autoridades reconocen el problema, pero no coinciden en la razón. El director de la Policía Rolando Mirones culpa a la justicia, ya que alega que las normas jurídicas permiten a los maleantes seguir delinquiendo. Mirones agrega que otro de los factores influyentes en la situación es el consumo de licor, y pidió al ministro de Gobierno y Justicia, Daniel Delgado Diamante, que cancele los permisos de bodegas en Panamá y San Miguelito. Delgado Diamante tiene otra tesis: la Policía necesita más recursos, mientras que el presidente Martín Torrijos cree que la sociedad debe cooperar más con la Policía en esta lucha.
El más reciente asesinato fue cometido el sábado contra Eduardo Cattán, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Colón, quien un día antes se había pronunciado por el descontrol de la delincuencia, tras el secuestro exprés de Erasmo Pinilla, hijo del presidente del Tribunal Electoral, y del asesinato del escolta del alcalde Navarro.
Según cifras de la Dirección de Investigación Judicial (DIJ), en el 2007 hubo 11,038 hurtos, 3,367 robos armados y 429 asesinatos. De los homicidios 108 fueron cometidos por menores.