Mayra Castillo
PA-DIGITAL
Espera una recuperación para el segundo semestre del 2010.
Tal como lo sostienen las estadísticas de la Asociación de Distribuidores de Automóviles de Panamá (ADAP), divulgadas por la empresa Ricardo Pérez, este sector mostró ventas por 43,228 unidades a finales del 2008, equivalente a un aumento de solo 1,853 unidades sobre el año anterior, cuando había registrado un crecimiento de 10,292 vehículos sobre el 2006.
Las cifras demuestran que, mientras ha continuado el crecimiento en ventas de autos, el ritmo ha bajado a ser una fracción de lo histórico.
Datos oficiales confirman que el mes con mayor pérdida de ventas fue noviembre del 2008, cuando solo se vendieron unos 2,932 autos, implicando una baja de casi 30% en ese mes comparado con el año anterior.
Javier Díaz, vicepresidente de ventas de Autos de Ricardo Pérez S.A. (Toyota), confirmó que esta baja efectivamente se dio en el sector a causa de la crisis mundial financiera, en el marco de una presentación sobre las ventas de este importante grupo, lo que ha llevado a la empresa a ajustar sus nivel de capacidad.
Afirmó que el sector se caracterizaba por un crecimiento muy regular hasta el 2001, pero desde ese año se desató un período de marcado crecimiento, que ahora se ve en desaceleración o corrección.
Para la empresa es importante mencionar que a un mediano plazo se pretende ofrecer autos mucho más económicos en precios, como medida de mejorar su oferta para el 2009.
Anticipa que esta merma en el ritmo de ventas se extenderá por un año y medio, lo que refleja un pronóstico de recuperación alrededor del segundo semestre del 2010.
La empresa pretende ser pionera en la distribución de autos con tecnologías alternativas altamente ecológicas, como son los autos híbridos creados por Toyota.
Asegura que en la actualidad el mercado es sumamente benigno para la compra de autos, ya que el cliente puede optar por plazos de hasta 84 meses de financiamiento con módicas letras al alcance de todo presupuesto.
Mientras tanto, Jorge Batinovich III, presidente de Distribuidora David (Mitsubishi y otros), coincide con Díaz con la baja que existe en el sector.
Comenta que el comportamiento de ventas para los meses de agosto hasta noviembre fue afectado por factores exógenos como las noticias relacionadas a la crisis financiera norteamericana, los colaterales efectos en títulos valores y escándalos de estafas multimillonarias.
En la opinión de Batinovich, la ansiedad en la plaza continúa, aunque a menor escala con la entrada del nuevo presidente de Estados Unidos.
Los cambios son reales y se iniciaron en noviembre puntualmente con los autos.
Por otro lado, Federico Alvarado Brid, gerente general de Copama (Isuzu, Fiat), manifiesta que la caída en las ventas en el cierre del año se debió primordialmente al endurecimiento de las condiciones bancarias para los compradores potenciales.
Al cierre de 2008 las ventas de vehículos Isuzu fueron las más altas en toda la historia de Copama.
El crecimiento para la empresa fue de un 9% más que en el 2007.
Las perspectivas que se tienen para este 2009 son bastante inciertas, debido a varios factores que afectarán al mercado automotor como el fortalecimiento del yen o el debilitamiento del dólar.
Además del endurecimiento del crédito bancario con altas tasas de interés, percibe que los bancos actuarán con diminución de los plazos de financiamiento e incremento en los abonos iniciales.
"Los vehículos Isuzu son líderes en la venta de camiones de la serie N por más de 8 años, por lo que durante este año 2009 aplicaremos todas las estrategias para seguir manteniendo este liderazgo", acotó Alvarado.
Además considera que los precios de los vehículos Isuzu son competitivos en el mercado, pero proyectan intensificar las acciones de mercadeo con mayor presencia en las ferias, brindándole un máximo respaldo a sus futuros clientes.
Financiamiento
Batinovich, hace énfasis en que el financiamiento se ha limitado producto de los ajustes recientemente aplicados por la banca para nuevos financiamientos.
Por ejemplo, autos que anteriormente se les abona 10%, ahora se les debe abonar un 20 o 30%.
"Esto limita el poder de compra de muchísimos clientes".
Mencionó Batinovich que el fenómeno viene amarrado a cambios y ajustes en la Superintendencia de Bancos, donde la misma sugirió este cambio para protección al sistema bancario y evitar o minimizar futuras pérdidas en los no pagos y coberturas o garantías que no cubran su valor.
Por Batinovich, la gestión de Distribuidora David, tiene que tomar en cuenta las realidades de la plaza, buscando ser especialmente más eficiente y generando ahorros significativos en toda su gestión, desde la compra de una pieza menor hasta la entrega de un auto.
Esta búsqueda de eficiencia se traduce a eliminar lo superfluo.
De lo contrario, iniciaría la reducción de personal, que es lo último que quiere hacer como empresa.
Fuentes del sector bancario confirman que la postura conservadora del sector se debe a una postura de mayor cautela.
Mientras tanto, Federico Alvarado Brid, gerente general de Copama, manifiesta que los bancos ahora perciben el mercado local con una óptica que incluye la situación financiera internacional, implicando que se han visto obligados a evaluar a sus clientes potenciales con más detenimiento antes de otorgar créditos, y evaluar así mismo las garantías que ellos presentan.
Por lo tanto, existe aprensión de que esta óptica externa pueda afectar de manera directa, su ritmo de ventas local, más allá de los propios factores de venta.
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