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Son cerca de mil 50 los bomberos que voluntariamente trabajan en la ciudad de Panamá, que afirman que para el Gobierno “no son prioridad”, y que decidieron anoche suspender su participación en las emergencias que se registran a partir de la fecha, incluyendo los carnavales.
La medida pone en riesgo a la ciudadanía ante emergencias, ya que solo hay 431 bomberos permanentes en la capital. El capitán Rubén Madrid, oficial voluntario de la Comandancia del Cuerpo de Bomberos de Panamá (CBP), señaló que no se trata de dejar desamparada a la población, pero lo que se busca es exigir que el Ministerio de Gobierno y Justicia les brinde los equipos y recursos necesarios para hacer su trabajo.
“Si sucede alguna emergencia de magnitud y no puede ser atendida, la responsabilidad no es de los bomberos; lo estamos advirtiendo desde hace mucho tiempo y no nos escuchan”, recalcó Madrid.
Los bomberos voluntarios del interior del país evalúan sumarse a esta medida de presión.
Los voluntarios de la zona 1 (capital) del CBP se reunieron en la estación No. 3 de Carrasquilla, y allí se discutió sobre la situación actual por la que atraviesa la institución, ya que –según los bomberos– a las autoridades se les olvida “el grave problema que tenemos de equipamiento”. Se recordó que el pasado 12 de febrero, el ministro de Gobierno y Justicia, Dilio Arcia, entregó 100 equipos personales a los bomberos de la guardia permanente, pero no se tomó en cuenta a los voluntarios. “Lo que queremos es que las cosas se hagan bien”, aseguró.
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