Roberto González Jiménez
rgjimenez@prensa.com
“Hemos insistido en varias ocasiones en que soterren esos enredos de cables. Tenemos que ver de dónde se obtiene el presupuesto y quién lo puede ejecutar. No solamente son feos, además son un peligro”.
Así de explícito se mostró Rubén Blades, administrador general de la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP), que reconoció que a pesar de no ser una materia de la jurisdicción de la ATP, el estado de la ciudad es una de las preocupaciones de la Autoridad, ya que la calidad de vida tiene un efecto directo en la calidad del turismo que se ofrece.
“Los turistas no vienen a un hotel, vienen a caminar y a conocer la ciudad”, aclaró.
Blades admite que esta situación es la consecuencia de “décadas de no hacer las cosas como se debería” y sugiere que a cada nuevo proyecto inmobiliario se le exija que soterre los cables de su entorno. “En ese sentido no hemos sido agresivos; el inversionista también tiene que participar en el desarrollo de las ciudades”.
Blades se refirió a las conversaciones que mantienen el Ministerio de Obras Públicas y Unión Fenosa para soterrar la línea de alta tensión que pasa por la Avenida Balboa: “Esos cables tienen que ser soterrados”, afirmó.
En ese sentido, el consultor turístico Miguel Ángel Rodríguez señaló que estaría plenamente justificada la inversión de 5.2 millones de dólares que costaría el soterramiento de las líneas de la Avenida Balboa. “Si no se soterran las utilidades, el beneficio turístico de la obra sería limitado”, apuntó.
“Con la cinta costera se va a ganar en calidad paisajística, pero para cambiar la imagen de la bahía hay que transformarlo todo y hay que eliminar las torres de alta tensión y el resto de los cables”, precisó.
En cuanto al resto de la ciudad, Rodríguez explicó el turista busca espacios “agradables a la vista y a todos los sentidos; encontrarse con una especie de jungla con cables y postes de madera y hormigón no es un paisaje agradable, no es lo que busca el turista”.
En otros países de la región las autoridades ya han impulsado planes para eliminar los tendidos eléctricos de las áreas metropolitanas. En Costa Rica, el Gobierno ha invertido 53.7 millones de dólares para soterrar las líneas eléctricas aéreas. En ciudad de Guatemala, por su parte, una orden municipal obliga a las empresas de telecomunicaciones a soterrar sus utilidades en un plazo de dos años.
El director del Instituto Guatemalteco de Turismo (equivalente a la ATP), Guillermo Novielli, aplaudió la iniciativa del Municipio y deseó que se concrete con la mayor celeridad posible “no solo en la capital, sino en el resto de las ciudades. Guatemala tiene unos edificios bellos en el centro histórico y su imagen se ve seriamente perjudicada por los cables”, denunció.
No comments:
Post a Comment