Wilfredo Jordán Serrano
Marianela Palacios Ramsbott
panorama@prensa.com
El Gobierno no solo cuantificará el valor de las acciones de Cable & Wireless (C&W) y Fortuna, sino de todas las empresas eléctricas en las que tiene participación, confirmó el ministro Héctor Alexander.
Fuentes de la Presidencia explicaron que una de las razones por las cuales están considerando la posibilidad de vender las acciones de C&W para hacer inversiones públicas es que, cuando entren nuevos competidores al mercado de celulares, el fuerte del negocio de la empresa se debilitará y bajarán los dividendos del Estado.
Estado valoriza acciones de Fortuna y otras empresas
El Gobierno realizará estudios sobre todas las acciones que tiene el Estado en las empresas de energía eléctrica para conocer cuánto vale esa cartera de activos, confirmó el ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander.
Como parte de esta iniciativa, el Gobierno contrató a Citigroup, por intermedio del Banco Interamericano de Desarrollo, para realizar un estudio sobre el valor de las acciones que tiene el Estado en Cable & Wireless y la hidroeléctrica Fortuna. Dicha consultoría ya fue entregada y, según fuentes de la Presidencia, aunque aún no hay ninguna decisión tomada al respecto, en ella se plantean varias opciones de venta: licitación y colocación a través de la Bolsa de Nueva York, entre otras.
"Siempre es importante que los gobiernos tengan presente qué rol van a jugar esos activos o la colocación de algunos de ellos en diferentes formatos de adjudicación para ayudar a acelerar la respuesta a problemas sociales del país", dijo Alexander.
Aunque se requiere hacer una ley, en caso de que se tome la decisión de vender todas o parte de las acciones del Estado en las empresas, el ministro añadió que a título personal le parece que una de las dimensiones que se debe tomar en cuenta es "cuándo es el momento óptimo en que puede ser recomendable, que se pudiera considerar una venta de acciones y, en segundo lugar, los recursos debieran ir al Fondo Fiduciario para que se utilicen en la solución de problemas apremiantes".
Fuentes de la Presidencia afirman que uno de los problemas que se ha planteado resolver con la colocación de estos activos es el cambio del sistema de transporte público.
En 1998, el Irhe fue dividido en cuatro compañías de generación, tres de distribución y una empresa de transmisión. Después de una subasta pública, el Gobierno vendió el 51% de las compañías de distribución, el 49% de las empresas de generación hidroeléctrica y el 51% de la termoeléctrica Bahía Las Minas. Mantuvo el 100% de control en Etesa.
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